Degustar productos frescos de mar, preparados en los numerosos y ubicuos bares, chiringuitos y restaurantes.

O bien probar deliciosas carnes y verduras ofrecidas con bonitas vistas en los pueblos blancos del interior.

La creativa cocina de la Costa Tropical incorpora los frutos tropicales que, dentro de Europa, sólo crecen en estas tierras.

Otra posibilidad: tapear, empezando por los callejones, seguido por espectáculos de flamenco en Granada, música en vivo y finalizar en bares y discotecas al pie de la playa en Motril.

Oleo turismo: el aceite de oliva es el elemento clave de la dieta mediterránea, declarado Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la Unesco.

La tradición azucarera de la región resalta en los productos de las heladerías y pastelerías de Motril y de la famosa bodega de Ron Montero.

Al visitar La Alpujarra, no os olvidéis hacer parada para probar el jamón de Trevélez.